Moto nueva

Ya tenía ganas de volver al blog, y  conectar con vosotros, pero se me complicaban los días y no había forma. Gracias seguir aquí  ¡

Isa abandonó la moto a los 19 años, después de un accidente que le costó, entre otras cosas, una cicatriz insignificante en la frente, una factura considerable del dentista y un susto más que importante a sus padres. Su madre dijo "basta". Ella, que  no tenía dinero, ni ganas, ni era el momento de llevarle la contraria a su madre, empezó a aprender las conexiones de bus. Pero sociable como es, y como era, a las dos semanas, decidió que era más divertido adaptarse a los horarios de los amigos con coche  y dejar  el bus solo como última opción.

25 años después, su madre la cuida desde el cielo, y ella es madre de dos pequeños. Sigue en el mismo trabajo pero la han cambiado de oficina, y para llegar a la nueva ubicación , tarda unos 45 minutos en metro y bus. En moto serian 10

Así que decide comprarse una moto. Miró, consultó,  volvió a revisar, y en una semana ya sabía qué quería, en dónde la vendían y qué le iba a costar. Se fue a buscarla una tarde, sobre las 17h.  Consiguíó el casco, candado y cofre gratis. Encantada de la vida, se sube a la moto, como si  la hubiera dejado ayer, arranca y con la cabeza bien alta sale a trompicones de la tienda.

Lo primero, ir a la gasolinera a llenar el depósito.

Llega, paga  25 euros, vuelve al surtidor y empieza a llenar... y cuando parece que va a parar, ella sigue con el pulso firme, dándole al surtidor. Hasta que no llegue a 25, ella no piensa soltar; solo faltaría que se le quedaran el dinero¡¡¡ . 

Empieza a derramarse el combustible. Intenta parar pero ya es demasiado tarde

Un charco rodea la moto

El chico de la gasolinera, sale disparado

- Chiquilla¡¡¡¡ qué haces¡¡¡¡ Vas a hacer que explote todo.

Isa que se va poniendo roja. Está por subirse a la moto y arrancar

- Y ni si te ocurra arrancarla aquí... A ver si vamos a tener fuegos artificiales antes de que anochezca¡¡

Lo contaba partida de risa, poniendo como excusa que cuando dejó la moto los precios iban en pesetas.