Un hombre llega a una venta de tarjetas de San Valentín y pregunta al tendero:
¿Tiene tarjetas que digan para mi único y verdadero amor?
El tendero responde:
Sí tenemos.
Y el hombre responde:
Deme ocho, por favorrr
Un hombre y su esposa estaban teniendo problemas en casa y se aplicaron la ley del hielo. De repente el hombre recuerda que al siguiente dia necesitaba que su esposa lo despertara a las 5 am para un vuelo de negocios. No queriendo ser el primero en romper el silencio (y PERDER), le escribió en una hoja de papel,
'Por favor despiértame a las 5 am' y lo dejó donde sabía que ella lo encontraría.
A la mañana siguiente el hombre despertó para darse cuenta que eran las 9 am y que había perdido su vuelo.
Furioso estaba por ir a ver porqué su esposa no lo había despertado, cuando encontró una hoja de papel sobre la cama. El papel decía:
-'Son ya las 5 am. ¡¡Despierta!!... .
Un señor va de cacería al África y lleva con él a su perrito.
Un día, el perrito se aleja del grupo, se extravía y comienza a vagar solo por la selva.
En eso, ve a lo lejos que viene una pantera enorme a toda carrera.
Al ver que la pantera lo va a devorar, piensa rápido qué puede hacer.
Estaba en eso, cuando ve un montón de huesos de un animal muerto y empieza a mordisquearlos. Cuando la pantera está a punto de atacarlo, él perrito dice:
-¡¡¡Ahhh, qué rica pantera me acabo de comer!!!
La pantera lo alcanza a escuchar y frenando en seco, gira y sale despavorida pensando:
-¡¡¡¿Quién sabe qué animal es ése?...Mejor me voy antes de que me coma!!!
Un mono que andaba trepado en un árbol cercano, oyó y vio la escena... Sin más, salió corriendo tras la pantera para contarle cómo la había engañado el perrito:
-¡Cómo serás ... Esos huesos ya estaban ahí! Además… ¡Es sólo un perrito!
La pantera, recontra caliente, sale corriendo a buscar al perrito con el mono montado en el lomo. El perrito ve a lo lejos que viene nuevamente la pantera con el mono y se da cuenta .
-¿Y ahora qué hago?- piensa todo asustado.
Entonces, en vez de salir corriendo, se queda sentado dándoles la espalda, como si no los hubiera visto, y en cuanto la pantera está cerca de atacarlo de nuevo, el perrito exclama:
¡¡¡Este monooo.... hace como media hora que lo mandé a traerme otra pantera y todavía no apareceee !!!
¿Qué puedo hacer con mis pecados, señor cura?
-Ora.
-Son las tres y cuarto, ¿pero que puedo hacer con mis pecados?
Gracias por el buen humor. Gracias por las sonrisas que me has sacado.
ResponderEliminarUn abrazo.
Buenísimos Miriam, los acabo de leer con mi hija y nos has regalado algunas buenas risas!
ResponderEliminarBesitos,
Me gustó el del perro avispado.
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