martes, 22 de junio de 2010

Desarrollando corazones

Hoy han pintado el patio de algarabía y euforia.

Como en un hormiguero recién atacado, está todo invadido por personas y personitas, desplazándose en movimiento continuo con sus carritos, bolsos, camisetas, mochilas arrastradas por el suelo y pelotas.

Van de un lado a otro, saludándose,reclamando la merienda, dándose recuerdos, limpiando mocos, bebiendo agua, preguntando por las vacaciones…

Es lo que tiene esa idea loca de liberar a todos los infantes el mismo día.

El ambiente se nutre de caos y notalgia en distinta proporción, aderezado con un aroma de algazara que se te mete en la piel y ya no marcha

Si te paras en la sombra, notas que sopla un aire espontáneo y fresco, más propio de la Mercè que de vísperas de S Juan. Pero como la vida del curso escolar lo marcan los santos y no la meteorología, con sol o con nieve, llega a su fin el curso.

Entre todos, mi vista se centra en un pequeñajo de unos tres años que grita al viento su gran hazaña: el año que viene estudiará P4.

Hoy ha ido a una clase de los mayores, para ver como será su aula de aquí a unos meses Y está impresionado, orgulloso de su nuevo reto.

Aún con la emoción en su rostro, en un momento se despide de la señorita con un beso enorme, recoge la mochila olvidada de una pequeña y se la acerca, para después lanzarse en un abrazo enorme sobre un niño de ojos rellenos de lágrimas. “Aunque el año que viene no vengas al cole, nos vemos en el parque”- le grita al oído. Imagino que se verán y jugaran, pero como le siga gritando así, lo dejará sordo y ya no escuchará nada más

Han acabado nueve meses de aprendizaje. Estudiar letras, formas y colores, ejercitar conductas, y sobretodo desarrollar corazones expandiendo toda su bondad

Concentrado de corazones en desarrollo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario