No tiene mucho que ver.
Son esas cosas que tienen la cabeza y el corazón, que de un retazo, hacen una imagen y te devuelven a un sitio, a una sensación, a un recuerdo.
Al leer el texto de este enlace  http://lavaraverde.blogspot.com.es/2012/05/el-nino-piloto-una-pesadilla.html  ,
me han venido a la cabeza los niños de Calcuta, haciendo volar cometas.
Desde las calles o desde los terrado.
Sin zapatillas ni sandalias.
Con esa amplia sonrisa blanca. 
Ojalá que por cada sonrisa que clonan en cara ajena, ellos recibieran  también una alegría
Este otro va de ikea
http://lavaraverde.blogspot.com.es/2012/06/reproche.
   
 
 
Genial lo del "niño piloto" ¿verdad?
ResponderEliminarMiriam, qué alegría me da que enlaces el reproche de Ikea!!
ResponderEliminar