Ha vuelto a casa después de un año de voluntariado en un orfanato de un pueblo muy pobre.
Al preguntarle como han ido esos 12 meses, me contesta
- Lo que más me ha impresionado, ha sido la vuelta.
- ¿ La vuelta?
- Sí, el quedar con la gente de aquí. Estar cenando y ver a todos tan pendientes del móvil. En un momento dado todos estaban leyendo o escribiendo, los ojos fijos en la pantalla, sin mirarse las caras. Sentir que no sois conscientes de la dependencia que tenéis del whatsapp, facebook, apalabrados...
Os estáis volviendo locos. No habláis, no os comunicáis, y la gente está muy sola.
Una amiga del cole me ha contado que lleva tres meses alimentándose de Caritas. Ninguna de sus amigas se ha dado cuenta, aunque han quedado tres o cuatro veces para un café. No le han notado ni la carita de pena, ni las ojeras, ni que ya no pide nada para beber, ni na de na. Ella no sabía como contarles su pena. Y necesitaba tanto poder hablar con alguien....
Una amiga del cole me ha contado que lleva tres meses alimentándose de Caritas. Ninguna de sus amigas se ha dado cuenta, aunque han quedado tres o cuatro veces para un café. No le han notado ni la carita de pena, ni las ojeras, ni que ya no pide nada para beber, ni na de na. Ella no sabía como contarles su pena. Y necesitaba tanto poder hablar con alguien....
Al día siguiente, cuando mi madre me preguntó que tal estaba María, no supe que contestarle.
Me he quedado preocupadísima
Me he quedado preocupadísima
Buenos días Miriam. Basta que digas que está en línea o que ahora no está conectada, en el carro de la incomunicación hay hueco para todo aquel usb-compatible que disponga de su propia batería de litio.Un abrazo.
ResponderEliminarMiriam... muchas, muchas gracias por este post. No te imaginas cómo me ayuda!
ResponderEliminarNecesito hablar y pido al Señor necesitar siempre que me hablen y saber escuchar.El movil,el fijo,el ordenador,!el portero automático!,todo es (o se ha vuelto) indispensable.No rechazo nada de nada pero no quiero perderme ni un minuto de la vida que tengo al lado,no quiero que sus ojeras se me pasen por alto.Janusa
ResponderEliminarSi en cada llamada de móvil, teléfono, etc. tuviésemos presente a quien nos ama de verdad la cosa cambiaría y mucho.
ResponderEliminarUn abrazo.
NIP: la verdad es que yo tb soy un tanto adicta. Si me olvido el móvil en casa, cuando vuelvo voy corriendo a ver cuantos whatsap me he perdido ... y ni mensajes ni llamadas perdidas ni na de na¡¡ ja ja ja.
ResponderEliminarFiat: El mail es mariadaguerre1@gmail.com
ResponderEliminar(de vez en cuando me da por mover las cosas del blog, y pasa lo que pasa. A saber a donde habrá ido a parar el sitio en donde sale mail¡¡¡)
Cuenta con mi oración. Espero que estes bien y puedas sentir, aunque sea a ratitos, lo cerquita que tienes al Señor
Un abrazo muy fuerte
¡ Genial tía Janusa, "hasta el portero automático" ja ja ja
ResponderEliminarBienvenido sea todo lo que nos permita comunicarnos de verdad. El problema es cuando nos aleja del que está delante A mi a veces me pasa Por eso quizás me ha impresionado tanto el comentario de la voluntaria. Yo tampoco quiero ser ciega a las preocupaciones de mis amigos y conocidos.
Capu: ahí debe estar la clave. Tener presente al Señor, en toda conversación
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