¡Oh sorpresa! Las personas que abarrotaban la librería se han esfumado. Ya no hay nadie preguntando por libros.
- ¿El pábilo vacilante?
- ¿Perdón?
- El pábilo vacilante. Pe, a, be de Barcelona, i, ele, o. Vacilante
Me dice que por pantalla aparece un “Pábilo”, en el Corte Ingles de Puerta del Ángel, a dos calles de donde estamos. El problema es que solo aparece un ejemplar, así que puede ser que ya haya sido vendido.
Vuelvo a pasar por la sección de música y localizo la guitarra que estoy buscando. Como no quiero pasearme con la guitarra arriba y abajo, pienso que lo mejor será ir al otro Corte Ingles y, después de preguntar por el libro, comprar el instrumento en la sección musical.
Librería del Corte Ingles de Puerta del Ángel.
-¿El pábilo vacilante de Enrique Garcia Maiquez?.
- Pa... ¿qué?
Pa comprarlo, le iba a contestar. Pero me contengo, no sea que no entienda la gracia.
- Pe, a, be de Barcelona, i, ele, o. Vacilante
- Voy a mirar en el ordenador…. No existe.
- Sí existe
- No aparece en el sistema
- Pero si vengo del otro Corte Ingles y me han dicho que hay uno y está aquí
- A ver.... Vuelvo a probar….. Anda, sí que está. ¿Es religioso?
- No
- ¿Es una novela?
- Yo diría que es como una recopilación de artículos
- Pues aquí pone novela.
Estoy por decirle que si pone novela, estará con las novelas. Y si pone recetas, con las recetas. Que frente a los ordenadores, una es muy sumisa y le diré que sí a lo que diga la máquina, con tal de localizar el libro.
-Pues será novela – le digo sonriendo y con toda la amabilidad que me sale del alma
Se dirige a las estanterías Yo detrás. Mira, mira y re mira
- Pues no está, voy a volver a mirar en el ordenador
Cuando se va, me acerco a las estanterías por donde estaba buscando. Son libros cuyo autor empieza por M
Doy dos pasos a la izquierda hasta localizar la G.
Y … ¡ allí está¡ El pábilo que me estaba esperando
Feliz, ya con el libro, subo a la sección musical.
Tienen la guitarra que busco, la barata, pero solo queda una y tiene a modo de distintivo una cicatriz, una raya. Me debato entre el corazón que me dice que la compre y la acoja en casa, y la cabeza que me lleva a volver al otro Corte Ingles y comprar por el mismo precio, una totalmente nueva
Gana la cabeza.
Dicen que los niños llegan a casa con un pan debajo del brazo. El pábilo ha llegado a casa con una guitarra ... y un tanto de pena por la pobre guitarra lisiada que se ha quedado en la tienda.
Para más información del p, a, b de Barcelona, i, ele, o --> El pábilo vacilante
¡ENHORABUENA! Misión cumplida. EGM estará encantado de saber lo que lucha la gente por su libro. De todas formas, un poco cortitos los dependientes, ¿no? La próxima vez llevas el título escrito en un papel. Y con mayúsculas, para que les cueste menos leerlo.
ResponderEliminarAhora voy yo a escribir una entrada sobre lo que me ha sucedido a mí con los 257 días. Snif.
Eh, genial lo de retomar la guitarra. Yo lo intenté el año pasado, pero fracasé por falta de tiempo y salvajismo de las niñas. Cuando sean un poco más grandes, a lo mejor.
ResponderEliminarEn cuanto al pábilo, espero que lo disfrutes. Te lo has ganado. Y EGM escribe muy bien (lo digo yo, que escribiendo soy malucha, pero leyendo soy una fiera)
Buenos días Miriam. Creo que me voy a animar a leer la 'novela'o lo que diga la computadora.Un abrazo.
ResponderEliminar¡Menudo trasiego, Miriam! ¿llegaste cansada a casa?, al menos con tus dos tesoros bajo el brazo ¡ahora a disfrutarlos!. Un abrazo y feliz semana.
ResponderEliminarPa... hacerte un monumento.
ResponderEliminarMuchísimas gracias por tanto esfuerzo que me suena a música celestial, interpretada, eso sí, a la guitarra.
Altea, genial la idea de llevar el nombre escrito en un papel, me la apunto
ResponderEliminarY muy buena la entrada sobre el libro del secuestro de Bosco. Me lo apunto tb en la lista de libros a leer.
Cordelia, el libro lo he podido disfrutar al momento.
La guitarra... uff, hay que afinarla Y por ser nueva, hacerlo constantemente¡¡¡¡. Me da que la guitarra va a dar para más aventuras¡¡
NIP: Es una "novela" genial¡¡ Y seguro que encargándola, es más fácil conseguirla (es que una a veces es muy tozuda y si se me mete algo en la cabeza, como encontrar un libro sin encargarlo, insisto hasta conseguirlo)
Teresa, has acertado de lleno Llegué a casa agotadísima, pero feliz. Ahora reparto el tiempo entre leer y afinar la guitarra (o intentarlo). Así ejercito ojos, imaginación, dedos, coordinación oído e imaginación otra vez para afinar.
E G-M : ¡Mogollón de gracias por el enlace! Y gracias también por el nuevo libro. He disfrutado buscándolo (por lo surrealista de la situación), ahora disfruto leyéndolo y lo disfrutaré en el futuro ... volviéndolo a leer. La guitarra se resiste y desafina Está como dolida porque abandoné a la herida, pero se le pasará en cuatro días.